Conferencia Pastoral 2016 | Testimonios
A los santos que se reúnen bajo el nombre Iglesia Bautista Reformada en North Bergen, New Jersey.
Que la gracia y la misericordia de nuestro gran Dios y Señor Jesucristo estén permanentemente con vosotros. Alabo al Señor porque me concedió estar de nuevo entre ustedes y una vez más comprobar y gustar de vuestra generosidad y hospitalidad. Gracias hermanos por pensar y actuar a favor de pastores y líderes hispanos, pues en lo particular una vez más fue de gran bendición estar bajo el sonido de la palabra del Señor por hombres escogidos para explicar, aclarar y exponer bien la palabra. Mi eterno agradecimiento.
Iglesia Evangélica de la Gracia , Santa Cruz de Tenerife, España
Estimados pastores Eugenio Piñero y Harvey Martinez:
Un cordial saludo en el nombre de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
Queremos con estas letras expresar nuestra gratitud primeramente a Dios, por estas pasadas conferencias pastorales, de mayo del 2016, Quien contestó nuestras oraciones, que nosotros y muchos más estuvieron elevando al Dios Todopoderoso, pues respondió dando un tiempo provechoso y bueno, según estos dos representantes de nuestra iglesia que pudieron estar con ustedes, el pastor Carlos Chico y el diácono Evaristo.
Realmente han regresado con una muy grata impresión de lo vivido allí entre ustedes, y el bien que le hizo a sus almas ver a la iglesia y a los hermanos, y exponerse a los predicadores en las conferencias, y los temas abordados. Todo esto ha contribuido a animarles en la fe y la verdad del Evangelio, a reflexionar para afirmarse en estas doctrinas de la gracia que ya conocen, para valorarlas más, si aun cabe, y estar más alertas de no llevarse por esas nuevas corrientes que hoy con tanta frecuencia se oyen.
En varias ocasiones han expresado, como fruto de cuanto entre ustedes oyeron y vieron, lo necesario que es volver a las “sendas antiguas”, dónde hay que permanecer.
También expresan su agradecimiento a la iglesia y los hermanos en general, y nosotros nos unimos a ellos, porque vieron el amor y la unidad con la que adoran a Dios y el sacrificio y esfuerzo que representaba para todos ustedes el que ellos estuvieran disfrutando de su hospitalidad y cuidados que brindaron, para servir al Señor, y para que Su reino se extienda en nuestros corazones y en las iglesias.
Sea nuestra sincera gratitud por su amor y fidelidad a Dios y Su palabra, apreciamos y reconocemos el bien que ha representado este esfuerzo de ustedes para estos dos hermanos que estuvieron allí, y por extensión para todos nosotros. Y apreciamos la ayuda para poder estar allí con todos ustedes.
Dios los cuide, y los guíe a todo Su bien, por el amor y la gracia de Jesucristo.
27 de mayo del 2016
Estimada familia Martínez:
Cuando he hablado con mis amigos de la iglesia sobre los recuerdos que tengo de mi viaje a New Jersey, lo primero que me viene a la mente es la increíble hospitalidad que ustedes tuvieron para conmigo. Una cama cómoda fue solo el comienzo. Ustedes me brindaron amor y amabilidad cristiana de muchas otras formas: con comidas deliciosas, conversaciones interesantes y hasta una taza de té caliente que me trajeron inesperadamente a mi asiento mientras trabajaba en la computadora. También tengo otros buenos recuerdos: la oración en familia al final del día o antes de salir, una excursión de media noche a Manhattan y Times Square (que fue impresionante), un concierto de piano y mucho más.
Es probable que no hubiera hecho el viaje si el quedarme en un hotel hubiera sido mi única opción. Por su amabilidad pude participar de la conferencia, algo que llegó en un momento crucial de mi vida como cristiano.
Como compartí con ustedes, solamente unas semanas antes de la conferencia se me había pedido que comience el proceso de llegar a ser un anciano en Cornerstone Baptist Church. La consejería piadosa que recibí durante la conferencia fue una bendición de Dios para prepararme para este tipo de servicio, igual como la enseñanza con el enfoque sobre las maneras en que la eficacia de un pastor en el ministerio depende de los siguientes factores:
• el mantener la comunión personal con el Señor por medio de la práctica de las disciplinas espirituales que los pastores a veces descuidan por estar más enfocados en el rebaño;
• el dar cuentas a otros pastores para tener ayuda en la batalla contra las tentaciones a pecar;
• el no transigir en el ministerio, sin importar las circunstancias, como aprendimos por medio de la enseñanza del Pastor Piñero sobre Esdras;
• el reconocer la batalla espiritual en la cual nos enfrentamos a principados y potestades que compiten en contra de la Palabra para ganarse las consciencias de los hombres;
• y mucho más, incluyendo uno de los sermones evangelísticos (Isaías 53:6) más poderosos que he escuchado en mi vida, que predicó el Pastor Albert Martin el domingo por la mañana.
Más allá del banquete de la verdad de Dios, el formar amistades con otros pastores en América Latina fue una gran bendición tanto para mí como para el Pastor Mark, ya que estamos trabajando para establecer una iglesia en Guatemala –una pequeña parte de la gran obra que el Señor está llevando acabo, con la ayuda de la iglesia de la que ustedes forman parte, al llevar la luz de la sana doctrina a una región que sufre por la plaga de tanta falsa enseñanza. ¡Es un privilegio para todos nosotros el ser parte de esta buena obra!
Entonces, nuevamente, quiero que sepan lo mucho que su hospitalidad significa para mí y también para el pastor Mark. Esperamos que algún día podamos devolverles el favor si deciden visitarnos en Orlando.
Mientras tanto, sigo orando por su familia.
Espero que nos volvamos a ver pronto.
Con amor,
May 27, 2016
Dear Martinez family:
When I share memories of my New Jersey trip with friends in church, the first thing that comes to mind is the amazing hospitality I was shown. Having a comfortable bed was only the start. There were many other ways in which you showed Christian loving kindness — delicious meals, engaging conversations, even an unexpected cup of hot tea delivered to my chair while I worked on my laptop downstairs. And there were other sweet memories: praying together at the end of the day or before outings, a midnight drive through Manhattan and Times Square, which was quite amazing, a piano serenade and much more.
I probably would not have made the trip if staying in a hotel had been my only option. Your kindness afforded me an opportunity to be part of that conference, which came at a pivotal time in my life as a Christian.
As I shared when I was with you, only weeks before the conference I had been asked to begin the process of becoming an elder at Cornerstone Baptist Church. The godly counsel received during the conference was a blessing from God to prepare me for serving in this way, as much Of the teaching focused on the ways in which pastors’ effectiveness in ministry depends upon:
• maintaining their own communion with the lord by practicing spiritual disciplines that pastors sometimes neglect because of their focus on their flock;
• seeking accountability with other pastors to help them in their fight against temptations to sin;
• being uncompromising in their ministry, regardless of the circumstances, as we learned from Pastor Pinero’s teaching from Ezra;
• recognizing the spiritual warfare in which we’re engaged against principalities and powers competing against the word of God for the consciences of men;
• and so much more, including one of the most powerful gospel sermons (Isaiah 53:6) I’ve ever heard by Pastor Albert Martin on Sunday morning.
Beyond the feast on the word of God, making friends with other pastors in Latin America was a great blessing for both me and Pastor Mark as we work to plant a church in Guatemala — a small part of a great work the Lord is accomplishing, with the help of your church, by shining the light of sound doctrine in a region plagued with so much false teaching. We are all privileged to be part of this good work!
So again, I want you to know how much your hospitality meant to me, and to Pastor Mark as well. We hope that someday we can return the favor, should you visit Orlando.
Meanwhile, I am continuing to pray for your family.
I hope our paths cross again soon.
With love,